Minutos antes del partido reflexionaba sobre los pocos fallos que ha tenido Lolo como técnico del Real Zaragoza, y a pesar de las derrotas en Málaga y San Sebastián, los dos fallos que le encontré no pertenecían a ninguno de esos partidos. Queriendo hacer especial hincapié, en distinguir entre, el error de sacar algo que crees que puede ser bueno y sale mal, y sacar algo que sabes que puede ir mal y sale peor. Por lo tanto, los dos fallos de Jiménez fueron sacar a Mateos contra el Rayo Vallecano, y el de probar juntos a Micael y Apoño. Ya que tras hacer la prueba dos veces y caer derrotado las dos veces, esta noche contra el Sevilla, quizás consciente de que era su Sevilla o no, la volvió a hacer.
Se salió de inicio con Roberto en la puerta, centrales Paredes y Mateos, lateral izquierdo Álvarez, he dicho bien no lo leáis dos veces, lateral derecho Lanzaro. Pinter y Micael en el doble pivote con Apoño algo más adelantado. Lafita y Luis García en las bandas y Postiga arriba como punta.
La primera parte fue una autopista para el centrocampo del Sevilla, se adelantó de cabeza Fazio en un saque de esquina, en el minuto 11. En el minuto 28 Negredo ponía el segundo en una sucesión de fallos, empezando por Pinter. Por fin el banquillo zaragocista se movió, tarde, muy tarde, Zuculini entraba por Apoño en el 34. Segundo antes, precisamente el centrocampista proveniente del Málaga, fallaba incomprensiblemente una gran ocasión, un mano a mano con Palop que mandó lo más lejos posible de la puerta custodiada por el guardameta sevilllista. En el minuto 43 llegaría el tercero de Negredo con una sucesión de fallos de la zaga maña que recuerdan al Real Zaragoza de inicio de la temporada.
De la segunda parte no hay mucho que contar, el Sevilla aflojó y salvo un disparo de Lafita, otro de Postiga, tres intervenciones de Roberto y que Mateos casi le vuela la cabeza a Negredo de dos patadas, no hubo mucho más. Jugó Oriol la segunda mitad en vez de Pinter y Aranda también tuvo sus minutos para dar descanso a Lafita.
Hay que olvidar el mal trago y pensar ya en el próximo partido, el domingo a las 4 contra el Granada. A pesar de los resultados negativos de esta jornada, aún seguimos de pie, aún estamos vivos y hasta que no me digan lo contrario los números, todavía conservo la fe y el domingo allí estaré, en la Romareda, para apoyar a mi equipo.
Quitando la defensa rara y las alineaciones siniestras que mencionas, lo único negativo de la jornada de ayer fueron los resultados de los equipos que no nos favorecen. Recuerdo muy clarito cómo se comentó que los partidos de Barça y Sevilla iban a ser complicados, y así ha sido. Error si alguien dió la salvación como hecha, pues nunca dejó de ser algo complicado. No perdamos la fé, que aún hay posibilidades, ni nos subamos todavía a ningún carro.
ResponderEliminarBueno como dice Algo ahora hay q ganar al Granada y recuperar sensaciones yo solo he visto hasta el 2 gol y lo he dejado porq me empezaba a alterar recordando recientes viejos tiempos, veía q este no era el día y por lo leido así fue. Ahora de nuevo la cosa casi está finiquitada pero al menos espero q sigan luchando mientras quede esperanza aunq sea más por las matemáticas q por otra cosa.
ResponderEliminarEs cuestión de ir jornada tras jornada, si hemos de caer, hemos de caer luchando, luchando hasta el final.
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