UN PASO PARA EMPEZAR A CREER

Había sorprendido el Real Zaragoza en el Molinón, con un juego intermitente, mezclando un fútbol combinativo en algunos compases del partido, con otros momentos en que el equipo se iba atrás y sorteaba la pelota. Pero tras el pitido final, era difícil creerse que era algo más que casualidad, basándonos en la dinámica tomada por el equipo esta temporada y que el Sporting acabara el partido con 3 jugadores menos sobre el terreno de juego, hizo comedir nuestras ilusiones y restarle importancia a los momentos de lucidez del equipo.

Ayer, en La Romareda, desde comienzos del partido, volvió a verse esos destellos de fútbol. Barkero está empezando a tirar del carro de este equipo, ofreciéndose en cada jugada de ataque y no llegando a realizar más de dos toques antes de soltarla en la mayoría de jugadas, llegando a conectar con los hombres de ataque, Montañés y Roger, como a ellos más les gusta, con un par de metros por delante para poder iniciar la galopada. Una galopada que si se veía truncada, podía contar con el apoyo de los laterales para oxigenar la presión a los interiores. Lo que viene a resumirse, en un fútbol rápido, en el que debido a la movilidad del balón y el ofrecimiento de los compañeros más cercanos, supone tener siempre una vía de escape por donde correr la pelota sin necesidad de perder la posesión del balón.

Quizás el único pero que añadiría al ataque, es la colaboración de Luis García, quien ralentiza el juego del equipo. Ayer Álamo en el segundo tiempo, demostró poder encajar en ese fútbol alegre, que por el bien de todos esperemos no sea mero espejismo. Víctor, que también entro en la segunda parte, también ayuda a la elaboración de ese juego, su mejora ha sido notable en los últimos partidos, pero su falta de implicación defensiva coincide con los bajones que tiene el equipo en las segundas partes, en las que incluso con superioridad numérica, se siguen echando atrás y recibiendo ocasiones.

Si al buen fútbol añadimos acierto y goles, el partido se vuelve disfrute para los aficionados. Roger, ayer "on fire", ha puesto el listón relativamente alto a Henríquez, el valenciano estuvo metido de lleno en todas las jugadas determinantes del partido. Fue quién remató el centro de Montañés en el primer gol, quisiéndolo alejar del alcance del portero, pero rematando lo suficiente cerca de él, para que el meta pudiera rechazarla, siendo Barkero desde la segunda instancia quien empujara la pelota al fondo de las mallas para establecer el 1-0 en el minuto 15. El segundo gol, viene precedido de un despeje de Diego Rico que la defensa del Alcorcón no sabe controlar y Roger, siendo el más listo de la clase, aprovecha para batir en un mano a mano al cancerbero, haciendo el 2-0 en el minuto 28. Y en el tercero, el delantero venido del Levante, es quién recibe el penalti de Babin. Penalti que sigo sin tener claro si fue dentro o fuera del área, pero de lo que sí estoy seguro es que la cartulina roja fue excesivo castigo para los visitantes. Luis García transformó la pena máxima y 3-0 en el minuto 55. Posteriormente, en el minuto 80, el Alcorcón recortaría distancias con un golazo de Pacheco con un disparto desde fuera del área que poco puede hacer Leo Franco, estableciéndose el definitivo 3-1.

En el aspecto defensivo, poco que objetar, el despiste al comenzar el partido en el lanzamiento de falta, pudo suponer una desgracia si Babin consigue darle de cualquier otra forma al balón. En el resto del encuentro el equipo sí se mostró más sólido que otras veces, Diego Rico fue de menos a más, Álvaro también tuvo alguna para olvidar, Cortés bastante bien y Arzo me va dando mejores sensaciones que Laguardia. Si que hubiera pedido a Acevedo un poco más de implicación a la hora de acosar al rival. Una vez con el 3-0, el equipo se relajó.

Así que para concluir, buen juego, tres puntos más, dos victorias seguidas y cuartos en la tabla a un punto del Sporting, segundo clasificado, y a cuatro del Depor.

Aquí tenéis el gol de Luis García, cortesía de @Aliciasantos_27