Parecía que era el Girona quien se jugaba estar entre los cuatro primeros de la liga, desde el primer minuto supo posicionarse y se fue directo al ataque. El Real Zaragoza, jugando en casa, regaló la centro del campo a un equipo que tenía dos bajas importantes en la medular. Durante los primeros diez minutos el asedio fue brutal y si a eso le añadimos, que el equipo gerundense es uno de los mejores a balón parado, pues tras 5 corners, el 0-1 era algo normal.
Menos normal fue lo del árbitro, que si ya estaba apoyando a un equipo que jugaba mejor que el Real Zaragoza, con la expulsión de Cabrera sentenció el partido. Su actitud desequilibrante no vio con el mismo rasero las entradas similares que se produjeron con una camiseta que con otra. Los de Machín se dedicaron a "piscinearse" por el campo esperando la lluvia de amarillas al equipo rival. Siendo lo del colegiado una actitud muy llamativa a estas alturas del campeonato que no tendrá mayor repercusión.
Tras el segundo gol, alguno de los jugadores intentaron reaccionar, pero otros no. Es una pena que cuando nos encontramos entre la espada y la pared, haya jugadores que quieran hacer lo que en la media hora anterior ni se habían molestado en realizar. Hinestroza, que no estuvo afortunado, fue de los que intentó echarse el equipo a las espaldas, perdió balones, demasiados, pero no dejó de ofrecerse, otros, como Pedro, desaparecieron por completo, para así hacerle el trabajo más difícil a Campins, mientras Lanzarote esperando en el banquillo. El resultado de esta apatía fue un 0-3 que nos saca fuera del playoff.
Tras el segundo gol, alguno de los jugadores intentaron reaccionar, pero otros no. Es una pena que cuando nos encontramos entre la espada y la pared, haya jugadores que quieran hacer lo que en la media hora anterior ni se habían molestado en realizar. Hinestroza, que no estuvo afortunado, fue de los que intentó echarse el equipo a las espaldas, perdió balones, demasiados, pero no dejó de ofrecerse, otros, como Pedro, desaparecieron por completo, para así hacerle el trabajo más difícil a Campins, mientras Lanzarote esperando en el banquillo. El resultado de esta apatía fue un 0-3 que nos saca fuera del playoff.
El que Carreras saliera de inicio con Dorca en vez de con Tarsi tiene cierto sentido, que no comparto, pero lo tiene. El entrenador apostó por la experiencia antes de por el jugador que mejor se podía asentar en esa posición. Para eso están los entrenamientos. Sin embargo, lo de Pedro, empieza a ser preocupante.
El Real Zaragoza se ha congelado y necesita reaccionar, desde aquella expulsión de Culio contra el Deportivo Alavés es un equipo completamente distinto al del mes de Febrero. El sábado que viene a las 6 tendrá otra oportunidad para desbloquearse, será en el Martínez Valero, contra el Elche.
¡Siempre Real Zaragoza!
Al final tanto va el cantaro a la fuente que se rompe, estaba claro q el Real llevaba varias jornadas que solo le salvaban los resultados y otras y diversas excusas, pero la realidad es que el equipo no estaba bien.
ResponderEliminarAhora esperemos q la derrote haga despertar a Carreras y a algunos jugadores y se busquen soluciones, ni Dorca ni Pedro son los responsables pero si que el entrenador debe ver su baja aportación y buscar opciones nuevas se Lanzarote, Tarsi, Gil, Dongu o incluso porq no Buenacasa o Diamanka. Me preocupa el bajón de CUlio que fue muy importante en el cambio de imagen del equipo alprincipio pero que sus ultimos partidos puff.
Sigo creyendo que hay plantilla para aspirar a todo aunq el ascenso directo lo veo complicado pero con garra y mejorando ciertos jugadores y dando oportunidad a otros todavía todo es posible.
Esperemos ver en Elche a otro Zaragoza y A por todas sin reblar.
Plantilla hay, junto a la del Almería y el Oviedo, somos de las mejores de la Liga.
EliminarIndependientemente de que el equipo no jugase a nada hasta que llegó la jugada de la expulsión (y a partir de entonces siguió sin jugar a nada) no cabe ninguna duda de que quien se llevó todo el protagonismo fue el soplapitos de turno. Hace poco exalté al árbitro por dejar todo el protagonismo a los jugadores; hoy tengo que alabar la incompetencia de un aficionado al arbitraje que como dice Algovan ni supo ni quiso aplicar el reglamento por igual para los dos equipos, un inutil que ni en Regional Preferente sería bueno (con todos mis respetos para los equipos que pueblan esa categoría).
ResponderEliminarEl hecho de que un supuesto juez muestre hasta 10 tarjetas sólo se puede ver desde dos prismas: que sea un partido duro, bronco y trabado (tal vez yo viese otro partido, pero juraría que salvo dos o tres jugadas aisladas no lo fue) o que el encargado de arbitrar el encuentro quiera algún tipo de recompensa personal por parte de algún estamento deportivo, lo cual no me extrañaría teniendo en cuenta que el hecho de mostrar una tarjeta a un jugador supone además de la acumulación de amonestaciones pagar una cuantía económica (no tengo claro a qué organismo). En cualquier caso, trencillas como el del pasado domingo son los que sobran y los que le dan al arbitraje español la categoría que tiene: arbitraje arbitrario.